para ser utilizadas como fondos y agregados de una historieta con guión de Ricardo Ferrari que necesitaba entregar con urgencia para ser publicada en alguna de las revistas de Eura, la editorial italiana de hsitorietas. El artista estaba ya muy mal de salud y por eso no vaciló en llamarme para ayudarlo.
Olivera se ha destacado por ser uno (junto a Alberto Breccia) de los primeros en usar el collage en sus historietas, por lo que no es extraño el pedido. Yo ya lo había asistido antes dibujándole unos castillos medievales y alguna escena de lucha. Pero realmente no he visto la publicación final de esa historieta veneciana, así que no se cómo habrá salido. Lucho Olivera siempre que podía me daba consejos sobre lo que debía yo mejorar para ser un buen dibujante, o cómo encarar un trabajo. Se lo extraña, la verdad. Era un hombre talentoso con una capacidad de trabajo enorme, tanta como su talento. Falleció el 11 de noviembre de 2005, poco después de entregar algunos trabajos a su editor.
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